Es originario de Europa, pero vive en muchas otras zonas. Su cuerpo es de hasta 8 cm de largo. Es de hábitos crepusculares y nocturnos, aunque en lugares húmedos en penumbra y en días de lluvia también es activo de día. En época de sequía se esconde dentro de la concha y se encierra elaborando un "tapón" a base de moco seco llamado epifragma.
Como la mayoría de las babosas y caracoles, posee órganos masculinos y femeninos, por lo que cualquier pareja de individuos puede procrear. Es hermafrodita, ovíparo y posee una concha calcárea enrollada en espiral. Famoso por su proverbial lentitud, se mueve a una velocidad máxima de 0,05 km/h, a pesar de lo cual es uno de los caracoles más rápidos.